02 abril 2009

Y LLEGÓ LA PRIMAVERA


Llegó la primavera y en lugar de deshacer el hielo que me envolvía se produjo una nueva glaciación, mis sentimientos se adormecieron en un no sentir que me recordaba a los efectos secundarios del tratamiento para la rinitis alérgica. Por eso enmudecí, no pensaba, no tenía nada que compartir.
Hoy he visitado a mi compañera de trabajo que se ha convertido en mi amiga, está de baja por maternidad y, aunque ya había conocido a su bebé porque lo trajo a la oficina, no había tenido ocasión de charlar con ella a solas, y de ponernos al día de los acontecimientos de los últimos meses. Su hija, Alejandra, lleva casi cuatro meses en este mundo, un mundo difícil al que tendrá que enfrentarse, pero viéndola, parece imposible que le puedan pasar cosas malas.
Me invitó a almorzar en su casa, con su marido, era la primera vez que entraba en su intimidad, en palabras si que había entrado antes, pero en la realidad de su casa aún no. Me recibió con la niña en los brazos, yo llegaba con su marido, el cual se apresuró a terminar la comida, y nos sentamos a comer. Presencié una estampa familiar que, aunque no es nueva para mi porque tengo sobrinos y otros amigos con hijos, me hizo sentir parte de esa familia.
Después de comer, él se fue al trabajo y nos quedamos ella y yo solos, con la niña, y me contó toda la experiencia de lo que fue el parto, los primeros días, y cómo su mundo está envuelto de perfume de bebé. Ella está feliz, exhultante, sigue siendo la misma, pero transmite un sentimiento amoroso que contagia.
Yo compartí con ella los capítulos de mi vida que se había perdido en todos estos meses, un pequeño resumen de muchas sensaciones, una especie de balance de mi mismo.
Cuando me despedí de ella horas más tarde, conduciendo mi coche, sentí la emoción de saber que formo parte de su vida, tan distinta a la mía, y tan auténticas ambas. Siento que ese adormecimiento en el que me encontraba ha desaparecido de golpe.
Me gustaría decirle a él que uno no escoge de quién se enamora. Estos días he pensado que quizás tenga un bloqueo emocional que me impide dejarme llevar cuando conozco a alguien que merece la pena. Ya me ha pasado antes y no creo que sea casualidad, por mucho que uno intente que las experiencias pasadas no te marquen, hay veces que dejan una huella imborrable que condicionan tu modo de actuar. Si fuera tan fácil que las cosas salieran como uno quiere quizás no sería tan intensa la sensación de enamoramiento. Pero no es así, uno no escoge de quién se enamora, solo puede intentarlo con la esperanza de que si no sale como debería, al menos queden aquellos momentos de intimidad como el recuerdo bonito de lo que podría haber sido.

10 comentarios:

Stultifer dijo...

uno no escoge de quién se enamora

A uno le pillan sin que se de cuenta. Hay que intentar no estar cerrado a nuevas experiencias, dejarse llevar y que te abracen como abrazan ahora a Alejandra.

theodore dijo...

Dejarse llevar....bueno, sólo hasta cierto punto. Si no se enciende la chispa necesaria (eso que llamamos "enamoramiento"), no hay por qué embarcarse en algo que acabará por hacer daño a los dos. La otra persona puede merecer la pena, pero la "chispa" es imprevisible e incontrolable, por desgracia. Porque a veces se enciende con quien menos debería.

Yo te deseo una feliz Primavera y un desbloqueo. Y me alegro de leerte.

Muchos besos.

Didac Valmon dijo...

a uno lo pillan sin darse cuenta y a veces el frío impide darse cuenta, espero que la primavera llegue pronto también a ti

Anónimo dijo...

debe de ser triste dejar pasar oportunidades qué nunca más se repetiran,en mi opinión,ver ante tus ojos como pasa y no poder hacer nada...

Anónimo dijo...

y pensar,qué podria haber sido?como podria haber ido?todo eso nunca lo sabras,no te llama la curiosidad?vivir anclado en el pasado debe ser duro ,porque no nos deja avanzar en nuestras vidas...

/ dijo...

Creo que en mayor o en menor medida, ya te han dicho todo lo que se puede decir en estos casos, lo único que puedo decirte es que vale la pena volverse a enamorar, es un riesgo, ya lo sé, pero todo es riesgoso en esta vida.
Celebro tu regreso, te extrañé mucho, en verdad.

Gracias por el comentario que me dejaste, querido Adriano, disfruta la primavera!!

BESOS

ADRIANO dijo...

Stulti, no siempre está uno igual de predispuesto, pero se intenta.
Theo, feliz primavera para ti también.
Didac, hoy he subido a la terraza a toma el sol y sentí su abrazo cálido.
Anónimo, es muy triste cuando algo que se intenta construir no tiene unos cimientos sólidos. Es importante saberlo cuanto antes, para no jugar con los sentimientos del de enfrente y, te aseguro, que es más difícil eso que dejarse llevar sin pensar en nada, siendo egoísta disfrutando de lo que alguien te puede aportar sin considerar el daño que le puedes hacer.
Kowalski, claro que vale la pena enamorarse, lo difícil es conseguirlo.
Besos

Anónimo dijo...

O quizas ya sea demasiado tarde para reparar el daño,¿quien sabe como estará el otro chico?y lo que es peor,¿a quien le importa como este el otro chico?has nombrado la palabra egoista,esa palabra que tan bien describe esta historia...la historia de jugar con una persona,quizas se te conozca mejor de lo que crees,otra cosa es que aqui intentes dar otra imagen,pero conmigo no lo consigues...(un chico que ha tenido la oportunidad de conocer MUY bien a Adriano)

Anónimo dijo...

Jugar de distintas maneras:creando una ilusion falsa en la otra persona,poniendo un falso interes...,ha sido una historia basada en la nada,quizas me ayude para futuras relaciones,espero que no me marque a la hora de conocer a gente,pero si asi fuese siempre te estaré agradecido...Gracias...

Anónimo dijo...

Llamame crio ahora por mostrar mi impotencia,pero no hay otra forma de expresar todo lo que siento...porque si,yo siento,que le puedo hacer?eso si,no me cambio por nadie,y nadie es nadie...